'Por una educación que nos enseñe a pensar no a obedecer'

domingo, 10 de marzo de 2013


Educación errónea.

“La admiración y la sorpresa son los motores de la motivación de los niños”. Esta es una de las ideas que nos dice Catherine L’Ecuyer,  investigadora de temas relacionados con la educación, en la entrevista de La Contra de La Vanguardia del pasado 11 de enero.
En la entrevista, Catherine nos cuenta cómo tendría que ser una buena educación para los alumnos y alumnas. Una educación que tiene que ser desde dentro hacia fuera, no al revés como actualmente pasa. Tendríamos que dejar a los niños y las niñas experimentar por ellos mismos para que aprendan sobre el mundo que les rodea a su ritmo, jugando e imaginando, para sacar así lo mejor de ellos mismos, para sacar su creatividad.
Actualmente estamos ‘sobreestimulando’ a los más pequeños con exceso de información, en las aulas con muchas materias y contenidos, en casa con la televisión,  internet, etc.  Es la manera de hacerlos más inteligentes y preparados, pero de esta manera realmente lo que hacemos es evitar que descubran por ellos mismos, que se sorprendan y que se motiven.
“Un niño ve por primera vez el cielo, y estrena el cielo. Crece maravillado por todo lo que le rodea. Si te fijas, de camino al colegio las madres arrastran a los niños, sólo las abuelas caminan con ellos” dice Catherine L'Ecuyer.
Todas estas son reflexiones que tenemos que tener muy en cuenta, pues nos dibujan cómo deberíamos estimular y mejorar las capacidades de los más pequeños.



No hay comentarios:

Publicar un comentario